Oración de Cierre:
Señor Jesús, hoy nos acercamos a Ti en humildad y entrega, sabiendo que en Tu presencia y poder encontramos la libertad que anhelamos. Reconocemos que hay batallas que no podemos ganar por nuestras propias fuerzas, sino solo a través de la oración y el ayuno, caminando en Tu autoridad y en comunión contigo. Nos despojamos de toda distracción, entregándote nuestros miedos, dudas y cadenas, y declaramos en Tu nombre que toda opresión es rota, que todo ataque del enemigo es deshecho y que toda atadura espiritual es destruida.
Padre, mientras oramos y ayunamos, derrama Tu poder y revela Tu gloria en cada área de nuestra vida. Danos un corazón sensible a Tu voz y una fe que crezca cada día en Tu presencia. Que este tiempo de búsqueda sea una preparación para caminar en nuevas victorias y para ver cómo Tu poder mueve las montañas que antes parecían imposibles de superar. Te damos toda la honra y toda la gloria porque solo Tú eres nuestro libertador. En el nombre poderoso de Jesús, ¡Amén y Amén!