El orgullo mata el amor Día 5

octubre 31, 2025

Reavivando el Romance y la Intimidad Emocional

“Goza de la mujer de tu juventud… Que su amor te satisfaga siempre, y en su amor recréate siempre.” Proverbios 5:18-19 

El orgullo mata el romance porque nos hace pensar: “No tengo por qué esforzarme; si me ama, que lo demuestre primero.” Pero el amor verdadero no espera, se anticipa. La intimidad en el matrimonio no ocurre por casualidad: es fruto de inversión, atención y entrega mutua.

Dios diseñó el matrimonio para que dos personas vivan desnudas y sin vergüenza (Génesis 2:25). No solo habla de lo físico, sino también de lo emocional: transparencia, vulnerabilidad y conexión. El orgullo rompe esa vulnerabilidad, pero la humildad la restaura.

El romance no se trata de cenas costosas ni de grandes sorpresas; se trata de pequeños actos diarios que le recuerdan a tu cónyuge: “Te elijo otra vez, todos los días.”

El verdadero romance nace en lo cotidiano: en un mensaje inesperado, un abrazo más largo, una palabra de afirmación o un gesto sencillo que dice: “Te veo, te valoro y eres importante para mí.” Cuando ambos cónyuges deciden invertir emocionalmente en su relación, la conexión se fortalece y el amor se mantiene fresco, incluso en medio de las responsabilidades y las rutinas de la vida diaria.

Además, el romance florece cuando dejamos de llevar cuentas de quién da más o quién se esfuerza menos. El amor sacrificial no compite, inspira. Si ambos deciden dar lo mejor de sí, no porque el otro lo merece, sino porque Cristo nos enseñó a amar primero, el matrimonio se convierte en un refugio de ternura, pasión y unidad. El orgullo exige; el amor sirve. El orgullo espera; el amor se adelanta.

La Llama del Amor

Imagina una vela encendida. Si no la proteges, el viento la apaga. Si no la alimentas, la cera se consume. Así es el romance: no basta con encender la llama el día de la boda; hay que avivarla cada día.

El problema es que muchos matrimonios quieren cosechar pasión sin invertir tiempo, atención y ternura. Pero el fuego que no se alimenta, se apaga. Dios nos llama a cultivar el amor intencionalmente, no a dejarlo en piloto automático.

Contexto Bíblico

El romance y la intimidad emocional son parte del diseño de Dios. El Cantar de los Cantares celebra la belleza de un amor apasionado y comprometido:

“Yo soy de mi amado, y mi amado es mío.”Cantares 6:3

Además, Proverbios 5:18-19 nos recuerda que Dios desea que disfrutemos del amor en el matrimonio. No es solo una relación funcional; es un reflejo del amor apasionado de Cristo por su iglesia.

Lectura Bíblica para Hoy (RVR1960)

Cantares 2:10-13

10 Mi amado habló, y me dijo: Levántate, oh amiga mía, hermosa mía, y ven.
11 Porque he aquí ha pasado el invierno, se ha mudado, la lluvia se fue;
12 Se han mostrado las flores en la tierra, el tiempo de la canción ha venido, y en nuestro país se ha oído la voz de la tórtola.
13 La higuera ha echado sus higos, y las vides en cierne dieron olor; levántate, oh amiga mía, hermosa mía, y ven.

Proverbios 5:18-19

18 Sea bendito tu manantial, y alégrate con la mujer de tu juventud,
19 Como cierva amada y graciosa gacela. Sus caricias te satisfagan en todo tiempo, y en su amor recréate siempre.

1 Corintios 7:3-5

3 El marido cumpla con la mujer el deber conyugal, y asimismo la mujer con el marido.
4 La mujer no tiene potestad sobre su propio cuerpo, sino el marido; ni tampoco tiene el marido potestad sobre su propio cuerpo, sino la mujer.
5 No os neguéis el uno al otro, a no ser por algún tiempo de mutuo consentimiento, para ocuparos sosegadamente en la oración; y volved a juntaros en uno, para que no os tiente Satanás a causa de vuestra incontinencia.

Ejercicio Práctico

Hoy, hagan juntos un “Reto de 15 Minutos de Conexión”:

  1. Miren a los ojos de su pareja durante 30 segundos, sin hablar.

  2. Digan en voz alta tres cosas que admiran el uno del otro.

  3. Hagan una lista corta de tres detalles sencillos que pueden hacer para demostrar amor esta semana (un mensaje, un abrazo, un gesto inesperado).

  4. Terminen con un abrazo prolongado de 20 segundos. Está comprobado que reduce el estrés y aumenta la conexión emocional.

Consejo de Autocuidado

Para dar amor, primero necesitas llenarte de amor. Hoy, dedica un tiempo para cuidar tu alma:

  • Ora y permite que Dios te recuerde cuánto te ama.

  • Escribe tres cualidades por las que agradeces a tu cónyuge.

  • Haz algo que te relaje: camina, escucha música o toma un tiempo de silencio.

Cuando tu tanque emocional está lleno, puedes dar sin agotarte.

Cita Inspiradora

“El romance no muere por falta de amor, sino por falta de intención.”

Ritual de Cierre

Esta noche, sorprende a tu pareja con un gesto de cariño simple: puede ser una nota, un abrazo, preparar algo que le guste o simplemente tomar su mano.
Antes de dormir:

  1. Lean juntos Cantares 2:10-13.

  2. Compartan una cosa que les enamoró el uno del otro al inicio de la relación.

  3. Pidan a Dios que renueve su pasión y unidad.

Oración Guiada

“Padre amado, gracias por el regalo del amor y del matrimonio. Reconozco que en muchas áreas he dejado que el cansancio, el orgullo o la rutina apaguen la llama de nuestro amor. Hoy te pido que avives el romance, la ternura y la conexión emocional en nuestro hogar. Enséñanos a priorizarnos, a cuidarnos y a elegirnos todos los días. Restaura la pasión y el gozo en nuestra relación. En el nombre de Jesús, amén.”

Desafío de Amor Propio

Hoy, mírate al espejo y declara:

“Soy digno(a) de amar y de ser amado(a). Hoy elijo invertir en mi matrimonio, priorizar nuestra conexión y celebrar el regalo que Dios nos ha dado.”

Espacio para Reflexionar

  • ¿Qué detalles dejé de hacer por mi cónyuge que antes lo(a) hacían sonreír?

  • ¿Qué barreras emocionales debo derribar para acercarme más a mi pareja?

  • ¿Qué puedo hacer hoy para encender nuevamente la chispa en nuestro matrimonio?

Cierre del Día

El romance no es un lujo; es un lenguaje de amor diseñado por Dios para fortalecer la conexión emocional, espiritual y física entre esposos. Hoy has recordado que el fuego del amor necesita ser alimentado con pequeños detalles, actos de servicio y palabras de afirmación. El amor no desaparece con los años, se apaga cuando dejamos de cuidarlo.

Dios quiere que disfrutes plenamente de tu matrimonio, que celebres la unión y que disfrutes la intimidad emocional que Él mismo creó. Reavivar el romance es elegir, cada día, volver a enamorarse de la persona que Dios puso a tu lado.

Mañana, en el Día 6, entraremos en un nivel más profundo: invitar a Dios al centro del matrimonio. Descubriremos el poder de la oración en pareja y cómo el Espíritu Santo puede unirlos de formas que el orgullo nunca podría separar.